El era un negro cabeza, cordobés de Laboulaye,changuero del Mercado de Abasto. Ella sirvienta, también cabecita negra, y bajada de Goya, Corrientes.
Fueron a tomar un copetín al paso y se mudaron juntos al conventillo. Ella quedó embarazada. El trajo del Mercado un cajoncito de Manzanas de Río Negro, y ella con unas cobijas rotas armó la cuna.
Ellos fueron los primeros dioses que conocí,
los únicos reyes de mi mundo.
Tengo ese oro líquido en las venas, y sola palabra. GRACIAS.
6 comentarios:
No sé qué significa changuero, copetín, conventillo ni cobijas...
y lo de negra cabeza intuyo pero no pongo la mano en el fuego.
Pero sé que Saturno va a lo esencial con pocas palabras: tus Gracias hacia ellos.
Un beso
Cuantas cosas extraordinarias que hacen nuesttros padres por nosotros y como nos cuesta muchas veces como hijos darles las gracias.
Me emocionó la imagen.
Besos!
Diosi, me emocionaste... Mis padres también son los reyes de mi mundo... y por suerte, se los puedo decir una y otra vez. LOS AMO!!!!
Hermoso post!!!
Besotes Reina,
Raticulina, qué bueno quea pesar de las palabras, se entiende lo que es esencial, no..? Cariños librianos.
Hola Mujer Moderna: es verdad, cuesta sentir que lo que uno ha recibido de los padres, es una gracia. Es la gracia que cada cual a su manera, puede dar. Y cuesta entender que las fallas paternas se deben a la ignorancia de vida y no a la falta de amor. Por lo menos en mi caso.
cariños librianos.
Perraaaaa....! decíselos sin parar..! Para los viejos, esas palabras justifican todo cuanto pudieron haber pasado. Besos.
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